Un cambio interior
 Por David M. Caballero

 Aceptar a Jesús como Maestro significa sumergirnos en su verdad. "Discípulo" significa "estudiante". Nuestra "segunda conversión" a Cristo es la decisión de desarrollar una fe y una comprensión cada vez más profundas de sus enseñanzas, impulsadas por un deseo permanente de conversión continua y de una mayor santidad de vida. Un cambio interior analiza Mateo, los capítulos 3 y 4 y las Bienaventuranzas, para mostrar las dimensiones de una conversión auténtica y continua, alimentada por las Escrituras, el estudio, la oración y la acción.

 títulos anteriores: Bienaventurados ellos, primeros pasos en el discipulado cristiano