Mantra
Esta forma de oración consiste en decir una frase corta, tal vez incluso una palabra, una y otra vez. A través de la repetición, el contenido de la frase debe pasar de los labios a la cabeza y al corazón , y así convertirse en una actitud permanente en la postura de uno hacia la vida y Dios. Hay tres formas de practicar esto:
La frase se puede repetir una y otra vez en una sesión de oración. Cuando se hace esto, las palabras se coordinan con la respiración para establecer un ritmo. Por ejemplo, la mitad de la frase se puede recitar (mentalmente) mientras se inhala y la otra mitad mientras se exhala. O se puede decir una palabra (o unidad que van juntas: por ejemplo, "la gracia... de Nuestro Señor... Jesucristo") con cada respiración. A medida que se recitan las palabras, la mente se concentra en su significado y el corazón las saborea con agradecimiento.
La frase se puede recitar con frecuencia a lo largo del día, para permanecer consciente del tema del día. Esta forma de oración, llamada en la tradición cristiana "la oración de Jesús" o, a veces, "oración jaculatoria", es útil para contrarrestar la tentación o adquirir una actitud habitual del corazón. Por ejemplo, decir frecuentemente a lo largo del día: "Sagrado Corazón de Jesús, en ti pongo mi confianza" es una forma de combatir la ansiedad y crecer en la confianza en Dios. Dicha con bastante frecuencia, la frase puede convertirse en un estribillo en la cabeza y en una orientación permanente del corazón.
Se pueden combinar las dos formas: se puede recitar la frase en oración una y otra vez durante un período de oración, luego tratar de seguir recitándola en oración durante todo el día.